De latín “columbarium” que significa “palomar”, nichos destinados a contener las urnas funerarias.
Un cuerpo que se repite en múltiples cuerpos, que es uno y muchos, que es niño, mujer, anciano, joven, adulto. Un cuerpo que es múltiples historias y vive en todas las épocas. Uno y muchos cuerpos que caminan y no van a ningún lado, que acumulan vivencias y no son más que la experiencia que los llena en el momento, son vacío para volverse a llenar, son el sonido eterno de lo que constantemente muere. Un cuerpo sin nombre. Un libro de carne que solo existe mientras es leído.
COMMENTS