Hasta Oceania, específicamente al archipiélago de Vanuatu, llegó el periodista Pirry con el firme objetivo de convertirse en el primer colombiano en colonizar el volcán Marum y lo logró. Sin duda, un viaje inolvidable al corazón del planeta.
La aventura de Pirry y otros nueve expedicionarios más, inició en la isla de Ambrym donde se encuentra el lago de lava del Marum. Luego de una larga caminata por playas negras, antes ríos de lava, se encontraron de frente con 7 horas de ascenso para llegar al campo base desde donde se lograba apreciar el cráter del imponente volcán del tamaño de un estadio. La meta, descender el abismo de 400 metros, cuatro veces la Torre Colpatria .
Aunque el clima y los espesos gases no colaboraban, Pirry nunca perdió la esperanza. Ver ondeando la bandera de su país lo motivó a olvidar que tenía el último turno en el descenso. Es que viajar hasta el otro lado del mundo no podía ser en vano.
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